Respondieron a la llamada de su anciano mentor, quien con la sonrisa de un zorro les esperaba con los brazos abiertos. Todos sus muchachos traían jugosos presentes robados a incautos ciudadanos. Ahora esperaban, como cada noche, que Padre Grillo les deleitase con un espectáculo de magia e historias vividas por héroes de leyenda.
señor, tras su paso por mi escaner, este nunca volverá a sentirse degradado, ya que sus obras han pasado por él...tío, cojonudo.
ResponderEliminarArrrwww, me encnata este, muy bueno señor :)
ResponderEliminarUf, me encanta :)
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